
Gold Fields celebra reconocimientos internacionales por su “responsabilidad” en la gestión de relaves. Directivos de Sudáfrica, Australia, Canadá y Lima aplauden el logro. Mientras tanto, más del 50% de los hualgayoquinos siguen hundidos en pobreza, con ríos contaminados, casas rajadas, tierras agrietadas y promesas rotas.
Cerro Corona es la primera mina del Perú en obtener el estándar GISTM. Dicen que es sinónimo de seguridad, transparencia y compromiso con las comunidades. Pero en Hualgayoc, la única certificación que sentimos es la del abandono.
¿De qué sirve tanta excelencia operativa si el pueblo sigue más pobre que antes de la minería? ¿A dónde fueron a parar las ganancias millonarias? Porque aquí, lo que queda son aguas acidas, enfermedades y silencio.
A las autoridades locales, regionales y nacionales: ya no basta con discursos ni ceremonias. Hualgayoc necesita acción, fiscalización real, reparación urgente. No más aplausos desde lejos. Escuchen al pueblo. Actúen con dignidad.